viernes, 13 de noviembre de 2009

Inspirada en ti.

Los amantes se encontraban cada atardecer en el paseo del lago. En un parquecito que a esas horas siempre estaba desierto, era muy romántico ver el amanecer desde allí. El lago era un lugar precioso en aquella ciudad, y claro, lo mantenían siempre bien cuidado y en buenas condiciones. Su amor estaba prohibido, prohibiciones sociales. Pero su pasión era más fuerte que cualquier prohibición estupida. Cada día se recordaban lo mucho que se querían, lo mucho que sus corazones se necesitaban el uno al otro para vivir. Un amor de esas magnitudes jamás puede desaparecer, solo es capaz de crecer y crecer. Aprovechaban cada segundo que tenían para pasarlo juntos, se abrazaban, se besaban, se miraban a los ojos durante horas enteras, se acariciaban.
Un día ella salió horas antes de casa y fue a aquel lugar, se sentó en un banco y sin moverse del sitio le esperó. Según vio su silueta inconfundible, echó a correr hacia el mientras las lagrimas la recorrían el rostro. Cuando le tuvo a su alcance le abrazó con más fuerza que nunca, y ahora lloraba con más intensidad que antes. El la devolvió aquel efusivo abrazo y la consoló durante unos minutos luego la separó de el, la agarró la cara con sus manos y la dio un suave beso en los labios. Ella sonrió y le volvió a abrazar, esta vez con menos intensidad. El fue el primero en romper aquel juego de besos y caricias y la pregunto que por qué estaba llorando. Ella le miró y una lágrima brotó de nuevo. Le sujetó sus manos entre las suyas y le respondió: Te amo. Te amo como a nada. Eres todo lo que me hace feliz. Siempre tuve las fantasías de encontrar a la persona ideal para mí, y nunca aparecía. Y sin darme cuenta, aquí estas tú, has llegado a mí vida de una manera inesperada y solo espero que no te vayas, que hagamos una vida juntos. Porque eres todo lo que yo necesito para seguir en pie. Durante el día lo único que pienso es en volverte a ver, volver a estar junto a ti. A que tu olor se enrede en mi cabello y tu dulce aroma me envuelva el alma. Pienso en como tus besos me vuelven adicta a ti. Porque por si no te a quedado claro, no hay nadie como tú, jamás lo ha habido y jamás lo habrá. Porque de pequeños detalles has llenado mi vida, haciendo de ella la mejor de las vidas que puedan haber sobre la tierra. Porque te veo y me tiemblan las piernas, como el primer día. Porque escucho tú nombre y sin quererlo me ruborizo. Para mi eres lo único, la única persona que amo en esta vida y se que serás la única persona a la que amaré de esta manera. Desde que te vi, me es imposible dejar de quererte.








Yopongoloslimites_xX

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